Pido una disculpa a ustedes mis lectores, no muchos pero sí leales. Me he ausentado casi un mes de Pluma Acid, cosa que no me ha tenido tranquilo, porque ya se me está olvidando cómo teclear. Lo noto en Contratos, la clase que estoy como robotina apuntando lo que escucho sin analizarlo. Sí he tenido muchas cosas que quiero plasmar en este espacio entre tréboles, picas, diamantes y corazones.
Lo que pasa es que no he tenido tiempo de estar frente a la máquina, fui elegido por un despacho muy prestigiado entre abogados en Guadalajara, "Robles, etc, etc etc,". Fui y todo, no me dieron el trabajo. Resulta que tienen una política sobre no contratar no-humanos. De nuevo me discriminan por ser peludo y tener cuernos. Y eso que me vestí de traje, con corbata y todo... ¿Tienes una idea de lo difícil que es amarrar una corbata sin pulgares?
Por el enojo de such discriminación, entré en un maratón de varias semanas consecutivas de alcohol, mujeres, drogas y venadas. Toqué fondo. De vez en vez tenía flashazos de la realidad, lapsos de lucidez, aproveché uno de ellos para publicar una entrada, sólo para desempolvar este pedo, un 16 de febrero. Noté que lo último que había escrito era sobre mi carrera, y política, lo seguiré haciendo, pero noté que a la gente no le interesa tanto como entradas de Harry Potter o de bomberas putas.
En uno de esos flashazos el 13 de febrero, pensaba escribir acerca de San Valentín, pero estaba quite sure de lo predecible que sería además de que el tema era ya todo cliché. Además que mientras pensaba todo esto estudiaba constitucional y veía mis manos derretirse, de repente cambiaban de color y sabor, por las envolturas deduje que eran dulces que me dieron; me sentí culpable por no devolver el detallito, pero opté por ponerme una concha de Maestro Yoshi y seguir estudiando.
Apenas el jueves pasado terminé exámenes, lo festejé con unas buenas cervezas y escuchando reggae en el cerro, ¿quién sospecharía de mí en un cerro? No sé cómo regresé a mi casa, nunca me había costado tanto trabajo manejar, aún cuando llegué creo haber hablado con mis criadores porque al día siguiente me dice mi jefe: 'Ya levántate, quedaste en esperar al del bóiler'. Todo lo veo como un sueño mal recordado, tipo flashazos, pero ni a eso llegan.
Hace como dos semanas también, era época de apareamiento entre mis conocidos venados, hacen unas pedas impresionantes, para mí no hay mejor DJ que un venado. En mi vida había visto tanto pisto, hembras y drogas en un mismo lugar, el paraíso yo diría. El pedo es que tienen que esconder todo cuando se acercan los de Discovery Channel, nunca van... Tienen un pedo con que los vean los humanos, tipo los magos de Howarts o los muñecos de Toy Story, bola de pussys; pero nunca van investigadores, si acaso pasan comandos de narcos o weyes bien grifos. Con los segundos ni nos escondíamos porque era perro tripearlos y quedarnos con su mota.
Había pensado en escribir sobre una variedad de temas de mi vida privada -como suelo hacerlo- pero he tenido que detenerme y autocensurarme porque mis delirios de fama me hicieron traicionar el cuasi anonimato en el cual fundé Pluma Acid. Nada serio yet. Tengo cierta confianza a quienes saben de este lugar, espero que el control de lectores no salga de mis manos.
Pero estoy de vuelta y espero estarlo más seguido. ¡Más mamado y vivillo que nunca!
