Si algo aprecio en esta vida, es la amistad verdadera; y no me refiero a los amigos con los que sales de parranda a terminar en el suelo como gorda atragantada, sino en los que realmente puedes confiar. Sé que se escucha como el típico fetiche de 'amigos forever' y mariconadas así, pero en realidad me impresiona lo altruista que puede ser esta relación.
¿Por qué empecé con esto? bueno, pues últimamente me he dado cuenta que desde antaño, la humanidad le ha sobrevalorado el concepto de amor de pareja. Yo no lo veo mas que una útil herramienta para elaborar relatos y filmes que dejan millones, al grado de narrar la historia de un muerto enamorado de una mujer que le entra a todo, y vaya éxito ha tenido.
Todo este tema del amor vuelve idiota a la gente, nublan su capacidad de juicio y dejan de prestar atención a cuestiones relevantes. Ojalá algún día pueda entender a esas personas y créanme que se los haré saber, pero sigo defendiendo la teoría de que el amor no es más que una arma publicitaria más que efectiva, después del sexo, claro está.
He notado que el humano tiende a amar por su miedo natural a estar solo, y al estar con alguien, sucumbe a su instinto de aferrarse a las cosas.
Sinceramente, a mí denme alcohol, drogas, una mujer y poker y seré feliz.
"A mí dadme las cosas superfluas que cualquiera puede tener las necesarias." - Oscar Wilde
1 comentario:
"Sinceramente, a mí denme alcohol, drogas, una mujer y poker y seré feliz."
amén.
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