Hoy me la pensé en ir a economía... era un desperdicio de tiempo, gasolina y calor corporal, pero como estoy a una falta del extra tuve que ir, me puse un pants, una chamarra, gorra y salí 'temprano'.
En periférico, pasé por lo que pensé que era una bolsa de arena, o algo así, pues fue como un topecito y luego como 'psssssssssshh', se detuvo y aceleré... estaba jugando carreritas con una cheyenne, logró alcanzarme y me hizo señas, yo se las contesté groseramente, insistió y señaló la llanta, entonces entendí que no estaba jugándome carreritas y me estaba haciendo un paro. Me dio mucha pena y sólo le hice una seña con el pulgar y bajé la velocidad.
Me detuve en el acotamiento y dije 'verga, qué ponchada está', porque estaba muy ponchada. Con cuidado fui hasta el 7eleven, porque me dio culo cambiarla en pleno periférico... y frío. Encendí un cigarrillo y empecé a pensar en cómo le diría al maestro que no me ponga falta (no pude recargar saldo porque no había sistema). En eso se estacionó un compa y ya le conté, se rió poquito y me preguntó que si sabía cambiar una llanta, a lo que le dije que ni puta idea, y le repetí la pregunta: 'verga, tampoco'. Después se le ocurrió que dejara ahí la camioneta, me fuera con ellos a clases y ya luego regresaba, dudé un poquito pero enseguida me trepé. Primero tiré el cigarro porque no conocía al del carro y se veía nuevo.
En clase me puse a buscar videos de 'cómo cambiar una llanta', primero salieron videos de gente pendeja que se moría mientras lo hacía y me reí un rato, después ya encontré varios. Todos iban dirigidos a mujeres, me agüité. Después de un rato encontré uno donde salía una patriot igual a la mía, pero se trabó y no supe cómo terminaba, sólo vi dónde iba el gato, y ya con eso estaba del otro lado. Un video decía que el primer paso era identificar la llanta ponchada.
Una amiga me aventó ahí en el 7eleven, me iba a poner a cambiarla pero me dio hambre, me metí a comerme unos dogos, ahí había una asesoría para la nueva camada de cajeros 7eleveneros. Los enseñan a usar las máquinas de café y cómo saber si esta está puerca; cómo funciona el queso y el chili, dónde están los vasos de cada tamaño; lo que hacen los clientes cuando no hay café, etc.
Al acabar de desayunar me salí y dije 'manos a la obra' (en serio lo dije, me sentí bien perdedor), puse el gato, leí el manual de instrucciones para darme una idea, jalé, giré, empujé, pisé, pateé, golpeé, brinqué, subí, giré, aflojé, subí más, quité, cambié, jalé, saqué, rodé, puse-a-un-lado, coloqué, puse, giré, jalé, pisé, apreté, repetí, fumé, giré, empujé, giré, empujé, bajé, quité, subí, guardé; y en cosa de 20min cambié exitosamente la llanta.
Hoy es viernes, a pistear y contar historias como esta!
Hoy aprendí dos cosas:
1. Soy una pistola para cambiar llantas, podría hacerlo nueve veces más... además de que me veo súper macho y sexy manchado de grasa.
2. No se requiere de ningún talento para ser cajero de un 7eleven.
Algo trae dios contra mis llantas, encontré un chipote en otra, quiere matarme...
3 comentarios:
a mí me pasa pero con las banquetas. No sé por qué se me da eso de querer hacer las llantas cuadradas. Luego una vez casi atropeyo a un "cristiano", mejor dejé el volante...
aparte casí siempre soy el más alcoholizado y menos apto para manejar
---no sé que es 7eleven--
La experiencia de cambiar la primera llanta. Todo un logro personal para el hombre.
Y por Ley de Murphy siempre se te poncha cuando vas solo y estas en los lugares más peligrosos para cambiarla.
Buen blog. Saludos!
A mi una vez se me ponchó mi shadow cuando traía fracturada la muñeca y así la cambié. Venía bien pedo de un bule. Uno de los momentos más machos de mi vida
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